«Klara y el sol» de Kazuo Ishiguro

Acabamos el curso con la lectura de un Premio Nobel y un cambio de registro, de esos que nos gustan: un poco de ciencia ficción que nos transporte a otra dimensión, aunque en este caso, no nos vayamos muy lejos de nuestra realidad…

Refrescante novela, previa al verano, que nos deja a la vez un buen sabor de boca y ganas de seguir leyendo a este autor.

Reconozco que Lo que queda del día es uno de mis libros pendientes, de esos que, por razones varias, se han ido quedando en el cajón de obras que quiero leer, pero nunca empiezo. Ahora ya, no lo pienso posponer.

Ishiguro

Mucha solvencia, mucha experiencia narrativa se adivina entrelíneas en las páginas leídas. Esa capacidad de contar con soltura, sin artificios y sin necesidad de dar demasiadas explicaciones, que solo manejan con maestría algunos escritores.

Se agradecen las elipsis, la ausencia de prolijos detalles en el relato: el lector no necesita toda la información para seguir un hilo argumental bien construido.

Y esa delicadeza con que construye el personaje, que una atribuye osadamente, a sus orígenes culturales.

Para saber más sobre él y su visión de nuestra novela, recomiendo este encuentro con periodistas en la presentación de la obra y estas reseñas:

Como siempre, os animo a leer esta y la documentación completa que tenéis aquí, después de finalizar la lectura del libro.

Klara y el sol

Ha resultado interesante ver a los humanos a través de los ojos de una máquina, que está muy bien dibujada: con una mezcla de la frialdad propia de un robot en su forma de moverse o de hablar y la ternura que va adquiriendo a lo largo de su aprendizaje.

La observación y la curiosidad con la que Klara afronta el mundo, le otorgan características infantiles, puras, ingenuas… Mientras que la asunción de responsabilidad de apoyo a la amiga y su capacidad de empatizar con los demás, le confieren cualidades que ya nos gustaría ver en algunas personas :).

Y es que Klara resulta la mejor humana de todos los personajes de la obra ¿no os parece?

La semana que viene seguimos profundizando en las diferentes tramas y el contexto de nuestra lectura de junio.

¡Hasta entonces!

Esta entrada ha sido publicada en Literatura inglesa y etiquetada como . Guarda el enlace permanente.

4 respuestas a «Klara y el sol» de Kazuo Ishiguro

  1. Conchi Allica dijo:

    Un libro sorprendente cuanto menos. No deja indiferente. El mundo de la infancia desde otras ópticas. Una pequeña distopia, que invita a la reflexión de temas nada banales, la infancia, las relaciones sociales, la sociedad de la tecnología, las enfermedades mentales, la niñ@s diferentes, y estoy de acuerdo, Klara mi humana favorita.

    • Novelerías dijo:

      Es lo mejor de la obra, lo que nos hace pensar sobre asuntos de mucho calado, que, seguro, darán para una muy jugosa reunión del club 🙂 ¡Gracias, Conchi!

  2. Kim dijo:

    Hola,
    Me ha encantado descubrir a Ishiguro. En su momento empecé Nunca me abandones, libro también suyo pero no lo pude terminar, cosa que solucionaré este mes sin falta.
    De él me ha gustado la forma en la que escribía, y me ha gustado mucho cómo relataba el comportamiento y pensamientos de algunos personajes a través de los ojos de Klara. No obstante, es cierto que en algunas descripciones si se me hizo algo pesado.
    En general me parece un libro muy bien escrito aunque da mucho para pensar, sobre todo en el valor que le damos a las cosas o personas cuando estas dejan de estar de moda o cuando pasan su momento de mayor esplendor y «utilidad». Bueno, al menos a mí me ha hecho pensar así, jejeje.
    Concuerdo con vosotros en lo de que Klara resulta la mejor humana de todos los personajes y también creo yo que la más humana de todos , y, también uno de mis personajes preferidos.
    Un saludo

    • Novelerías dijo:

      A mí también me pasó que en torno a mitad de lo leído, tuve un momento en que se me hizo algo lenta, pero una vez superado ese pequeño bache, creo que ha sido una lectura interesante, con muchos temas sobre los que reflexionar, entre ellos la obsolescencia de las cosas y las personas que tu señalas. En muchos casos, como en el de Klara, la experiencia es un plus, pero no se valora. ¡Gracias, Kim!. Nos vemos a la vuelta del verano.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *