*Aviso: es preferible no leer la entrada si no se ha leído antes la novela.
Empezamos, para cambiar un poco, con musica.
Vinculé la novela desde el primer momento a esta canción y algo de conexión hay ¿no os parece?
Pero esta entrada es en la que analizamos los temas de la obra, así que, vamos a ello…
- El amor. Olav se declara desde el primer momento enamoradizo y efectivamente, comprobamos que tiene facilidad para caer rendido ante las mujeres. Pero sus «amores» son distintos: por un lado, el platónico que siente por María, a la que protege, observa, sigue, habla (pensando que no le puede oír), escribe… y el carnal y apasionado que le inspira Corina. ¿A quién ama Olav? ¿Está enamorado de ambas?.
- La delincuencia y sus múltiples aristas: asesinatos por encargo, prostitución, tráfico de drogas… La impunidad con que destroza vidas, la falta de escrúpulos del mundo del hampa de Oslo y sus rencillas, son protagonistas del libro. Con el dinero que todo lo puede, como objetivo a conseguir, caiga quien caiga.
- El maltrato físico, la violencia sobre los débiles, encarnados en la figura del padre de Olav. La brutalidad en la infancia marca el futuro de un niño que acaba reproduciendo la parte más violenta de su familia, aunque conserva la ternura de su madre.
- El alcoholismo como vía de escape ante esa humillación constante, que en este caso, viene de la mano de la madre del protagonista.
Y en cuanto a los personajes, contamos con un protagonista narrador que se dedica al asesinato por encargo, con eficiencia y por dinero, porque es lo que sabe hacer mejor. No es cruel. Es calculador a la hora de planificar sus encargos y está acostumbrado a sobrevivir en un entorno hostil, sin embargo, se apiada de las familias de las personas que despacha o de las mujeres débiles. Tiene corazón y eso no es bueno en el mundo en el que vive.
Aunque debería parecernos un monstruo, resulta encantador, tierno, adorable. Asegura que no sabe de nada, pero es un lector apasionado y su discurso está plagado de citas filosóficas y literarias.
¿Demasiado ingenuo metiéndose en la boca del lobo de su enemigo, pensando que la mujer de sus sueños es trigo limpio? Sin duda, pero él es en sí mismo una contradicción: parte de lo bueno de su madre; parte de lo malo de su padre…
Hoffmann, el jefe de Olav, una de las cabezas dirigentes del submundo del crimen en la ciudad. Ningún escrúpulo en utilizar a las mujeres para la prostitución, ejerciendo la violencia; ningún problema en distribuir droga por la ciudad; ningún remordimiento en encargar asesinatos. Aunque parece que todo lo tiene controlado, acaba perdiendo.
«El Pescador» termina, por el contrario, ganando la partida: acaba con el rival, con el sicario y se queda con la chica. Es un estratega perfecto. Tiene tres alternativas para conseguir su objetivo: el mismo Olav y sus propios matones + Corina.
Ella es la «femme fatale», siempre juega a caballo ganador, adaptándose al medio = al hombre de turno. En el caso de Olav es tan rápido su proceso de «enamoramiento» que resulta sospechoso (no para él).
María: coja y sordomuda, aunque oye y habla algo. Se deja querer sin actuar y cuando parece que va a dar el paso… aparece Corina. Su papel estelar al final, es un cierre precioso para la novela, un poético enfrentamiento entre la realidad (María) y lo que sueña Olav en el último momento, que a la vez sirve al autor para contar muchas cosas de la historia que les une.
Completad esta entrada con vuestros comentarios, el turno es vuestro
Yo creo que Olav tiene muy claro desde el principio lo que puede pasar si no lleva a cabo el encargo de su jefe, y sabe que, aunque no tenga ninguna oportunidad de sobrevivir (es lo que tiene su trabajo, que es de alto riesgo y de vida corta), buscar ayuda en el enemigo es el único resquicio con el que puede contar. Me parece que solo busca ganar algo de tiempo para aprovechar el interés transitorio de Corina. Al fin y al cabo, más que amor, lo que quiere es reescribir su vida, y Corina es un regalo inesperado para un perdedor, que es lo que él se siente. Yo estoy convencida que el único sentimiento verdadero es el amor por María, que no se atreve a declarar porque no quiere unirse a otro ser perdedor, como él mismo sugiere en el libro y que, francamente, me choca y me parece que retrata bien su personalidad. Estos nórdicos….
Pues puede ser, sí ¿por qué no? Cualquiera sabe con este chico jajajaja. Aunque también te digo, que si Corina no le sale rana, me parece a mí que en Paris de María no se iba a haber acordado…
Sí, sí, de acuerdo totalmente. Es una situación tan ideal para él que no duda en intentar alcanzarla, aun sabiendo que era prácticamente imposible. El peligro que corre lo tiene clarísimo desde el principio.
Hay un tema importante que me gustaría apuntar y es la liberación a través del asesinato de aquel que oprime. Olav, libera a su madre, se libera el mismo y esa es su forma de amar, liberando a las víctimas. Al igual que en los miserables …. la liberación del oprimido. Una persona puede enmendar su pasado haciendo el bien, para Olav ser útil a la sociedad, liquidando al “abusón”, ‘el que no sirve para ser ladrón, conductor o fugitivo.
No sé, Conchi. En el caso de su madre y de sí mismo, puedo verle de liberador. En el caso de los demás asesinatos, no tengo tan clara su vocación de liberar al oprimido. En realidad no mata a los abusones, mata a gente como él, pringados a sueldo de los verdaderos abusones. Se dedica a despachar porque no sabe hacer otra cosa, no por ser útil a la sociedad ¿no?. Es verdad que él se imagina a Valjean como asesino que mata a «alguien que seguramente se lo tendría merecido», pero me cuesta ver la relación entre Olav y ese grupo de jóvenes idealista que pierde la vida luchando para conseguir mejorar las condiciones del pueblo y su libertad…
Me vais a perdonar, pero tengo debilidad por este musical
🙂